La Universidad Católica de la Santísima Concepción, en conjunto con el Fondo de Solidaridad e Inversión Social (FOSIS), llevó a cabo el seminario “Pobreza y Vulnerabilidades del Siglo XXI”, instancia que permitió reflexionar sobre los desafíos sociales actuales y fortalecer la vinculación entre la academia, las instituciones públicas y la sociedad civil.
En la apertura, el Vicerrector de Vinculación con el Medio, Andrés Varela, enfatizó que la pobreza debe abordarse de manera multisectorial y multidisciplinaria, dado que diversas disciplinas están llamadas a contribuir a su superación. Además, destacó la relevancia de las alianzas entre el Estado, la sociedad civil y las universidades como camino para avanzar en soluciones integrales y sostenibles.
Posteriormente, el Director Regional de FOSIS, Richard Carrillo, presentó la ponencia “Nuevas vulnerabilidades sociales en Chile: desafíos del siglo XXI”, destacando que las problemáticas de hoy no se reducen a la pobreza por ingresos, sino que se expresan en fenómenos como la desigualdad estructural, el cambio climático, la fragmentación institucional, las brechas educativas y digitales, y la exclusión identitaria. Señaló que estas dimensiones se entrelazan, creando círculos de precariedad y exclusión que requieren respuestas integrales. En su mensaje final, llamó especialmente a las nuevas generaciones a involucrarse como protagonistas de la transformación social, recordando que la resiliencia se construye colectivamente y asegurando que ninguna persona ni comunidad quede atrás.
La Decana de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales, Nadia Castro, abordó la brecha digital como una nueva forma de exclusión social, señalando que hoy la falta de conectividad o de habilidades digitales margina a las personas de oportunidades educativas, laborales y culturales. Subrayó que estas desigualdades se intensifican cuando se cruzan con las brechas educativas, generando trayectorias que dificultan la movilidad social. En su reflexión final, enfatizó que la tecnología debe ser un puente hacia la equidad y la inclusión y no que genere exclusión.
El espacio final estuvo a cargo del Director Ejecutivo de Pastoral, Pedro Macaya, quien realizó un análisis y reflexión a partir de las presentaciones anteriores, destacando lo significativo de abordar la vulnerabilidad y la pobreza desde una perspectiva pastoral. Su intervención invitó a mirar estos desafíos no solo desde lo académico y lo institucional, sino también desde un compromiso ético y humano con las personas y comunidades más afectadas.
Este seminario se enmarca en visibilizar las problemáticas sociales y aportar a la construcción de soluciones conjuntas, reafirmando el rol de la Universidad y de las instituciones públicas en la promoción de una sociedad más inclusiva y resiliente.